23 junio 2025
En una ceremonia realizada el jueves 12 de junio en la Casa Central de la Universidad de Chile, el Consejo de Rectoras y Rectores de las Universidades Chilenas (CRUCH) presentó el informe “Bienestar Universitario: Claves para la Convivencia y la Salud Mental”, que recoge el trabajo realizado durante 3 años, por una comisión del mismo nombre, en la que participaron representantes de decenas de universidades.
El documento surge como respuesta a la preocupación por la salud mental y la calidad de la convivencia en las comunidades universitarias del país, que dio pie a la constitución en 2022 de la Comisión de Convivencia Universitaria y Salud Mental, la cual fue impulsada por las máximas autoridades de la UC y U. de Chile, y a la cual posteriormente se fueron uniendo decenas de otras instituciones.
Al lanzamiento del informe asistieron autoridades y profesionales del CRUCH, de la U. de Chile -encabezados por su Rectora Rosa Devés-, la UTEM y la UC, entre otras instituciones. De parte de nuestra casa de estudios, estuvieron presentes la Prorrectora UC, Marianne Kraus, la directora de Asuntos Estudiantiles, Carola Méndez, la Ombuds UC, Pilar Cox, y la mediadora estudiantil, Valeska Grau, junto a profesionales de la DAE y otras unidades.
El trabajo de la Comisión de Convivencia Universitaria y Salud Mental contó, desde su creación en 2022, con el respaldo y liderazgo del exrector UC Ignacio Sánchez, quien lideró la comisión junto a su par de la U. Chile y de la UMCE. En tanto, Valeska Grau, Mediadora Estudiantil UC, jugó un papel fundamental, participando en las instancias de reflexión, discusión y como coautora del documento final.
La presentación del informe fue complementada con un panel de conversación que contó con la participación de destacadas figuras del ámbito académico y estudiantil: Sandra Gaete, presidenta de la Comisión de Vicerrectoras y Vicerrectores Académicos del CRUCH y Vicerrectora Académica de la UTEM; la Dra. Vania Martínez, directora del Núcleo Milenio para Mejorar la Salud Mental de Adolescentes y Jóvenes (IMHAY) y docente de la U. Chile; Sofía Ávila, vocera de la Confech y vicepresidenta de la Federación de Estudiantes de la U. Diego Portales, y Valeska Grau, mediadora estudiantil de la Oficina Ombuds UC e integrante de la Comisión.
El panel, titulado “¿Cómo avanzamos hacia el bienestar de nuestras comunidades universitarias?”, permitió profundizar en las recomendaciones del informe y reflexionar sobre los principales desafíos que enfrentan las instituciones para avanzar en la construcción de entornos universitarios saludables, inclusivos y seguros para todos/as sus integrantes.
En el panel, Valeska Grau contó sobre la creciente preocupación que existía en aquel entonces, 2022, por la violencia que expresaba la comunidad estudiantil en redes sociales y la urgencia de contar con un mecanismo que permitiera manejar los problemas de convivencia que ocurrían en 2022, cuando las personas estaban volviendo a la presencialidad, tras 2 años de limitaciones debido a la pandemia de COVID-19. Para ello, la comisión formuló dos líneas de trabajo, una centrada en la prevención y otra en la promoción de una sana convivencia. Al respecto, Grau expresó:
“Las universidades tienen un rol muy importante en la educación de los estudiantes. No solamente formamos a personas que van a desempeñarse profesionalmente, sino que también van a ser ciudadanos. En ese sentido, debería ser parte del sello y de nuestros perfiles de egreso, personas que sepan dialogar pacíficamente para resolver conflictos, y que en el fondo tengan impresos estos valores de tolerancia, inclusión y el respeto mutuo”.
En esa línea, Pilar Cox, Ombuds UC catalogó la entrega de este informe como “un paso esperanzador e importante para continuar con el trabajo que hemos estado realizando”. Sobre el objetivo del informe agregó: “yo creo que estamos emprendiendo un desafío y ahora está justamente en la línea de la articulación, es decir, cómo hacemos y cómo podemos crear un lenguaje y mirada común, una forma de abordar la convivencia que haga que, en distintas unidades y diferentes lugares de la universidad, podamos hablar de convivencia más o menos con el mismo lenguaje y desarrollar herramientas que nos ayuden a resolver el conflicto”, señaló la máxima autoridad de mediación estudiantil UC.
Al ser consultada por el involucramiento de la labor docente en este punto, la educadora explicó: “También soy docente y creo que los profesores y profesoras tenemos un rol super importante en este tema. Es fundamental que veamos cómo podemos aportar (…) no es que necesitemos atender cada episodio, las situaciones de salud mental o los conflictos de convivencia, sino de cómo creamos espacios más nutritivos en nuestra sala, de mayor confianza, mejor relación, de más vínculo, de manera que podamos dejar esos espacios para los y las estudiantes”.
A este importante tema agregó “Debemos transversalizar esta formación para estudiantes como para docentes. Esto es, por supuesto por el bien de los estudiantes, pero uno como docente, cuando sientes que puedes generar un buen espacio en el aula, vincularse sanamente con los estudiantes, poner límites, exigir sin imponer y sin sentir que esa exigencia es mal recibida, a uno como docente se le alivia la tarea”, dijo.
La comisión fue creada en julio de 2022 y respondió a la preocupación del pleno de rectores/as por favorecer el bienestar y cuidado de las comunidades universitarias. Está integrada por representantes de la UC, U. Chile, U. Católica de Concepción, USACH, U. Austral, U. de la Serena, U. Católica del Norte, de Magallanes, UMCE, U. de la Frontera, U. Talca, UPLA, U. Los Lagos, UTEM, U. Diego Portales, U. Santísima Concepción, U. Andes, U. Alberto Hurtado y U. Católica de Temuco.
El informe se organiza en tres capítulos que permiten comprender a fondo la situación en salud mental y convivencia en la educación superior.
El primero entrega antecedentes claves, analizando la realidad que enfrentan las y los jóvenes, los programas existentes en universidades del CRUCH, los principales conflictos de convivencia y los desafíos asociados a un estudiantado cada vez más diverso. También se revisa el marco normativo y las políticas públicas relacionadas con esta temática.
El segundo capítulo presenta las bases teóricas del informe, incluyendo conceptos centrales y modelos sobre salud mental, resolución de conflictos y su vínculo con la convivencia universitaria. Finalmente, el tercer y último apartado identifica seis nudos críticos que obstaculizan el bienestar en las comunidades universitarias, y propone recomendaciones concretas para avanzar hacia entornos más saludables, inclusivos y seguros.
La rectora Rosa Devés agradeció el “extraordinario trabajo, realizado por un equipo muy comprometido” y destacó que “este informe refuerza la idea de que debemos cuidar a nuestras comunidades y que la convivencia es clave para la salud mental y el bienestar”. Por otro lado, mencionó la importancia de centrarse en las y los estudiantes, expresando que “desde que todas las universidades empezamos a poner el foco en equidad e inclusión, empezó a aparecer una responsabilidad institucional compartida: si vamos a profundizar en equidad e inclusión, debemos tener estrategias de acompañamiento, poniendo al estudiante en el centro, más allá del discurso. Eso significa que tenemos que conocerlos, preguntarles quiénes son, atenderlos en su diversidad, con sus historias propias y con las riquezas que traen a la universidad. En este tiempo, hemos avanzado en ese camino y nos hemos preparado para trabajar juntas como instituciones”, enfatizó la rectora.